River Plate venció por 1 a 0 a Tigre en tiempo de descuento, tras un desborde de Ariel Ortega que empujó Rogelio Funes Mori con la cabeza. De esta manera, los de Núñez consiguieron tres valiosos puntos que le sirven para dejar de pensar en el fantasma del descenso.
El conjunto conducido técnicamente por Ángel Cappa sigue demostrando que tiene mucho por mejorar. En un estadio Monumental repleto, ante más de 55 mil personas, no logró dominar a su rival, que se mostró muy ordenado aunque también con flaquezas en la ofensiva.
En una aburrida primera mitad, los locales no supieron llegar al arco de Tigre y recién tuvieron una situación clara de gol a los 44 minutos, cuando luego de una habilitación de Paulo Ferrari, Ortega remató cerca del arco de Islas. Por su parte, el Matador fue más claro y llegó concretamente con un disparo de Martín Galmarini que se estrelló en el palo derecho de Carrizo.
En la segunda parte, las cosas no cambiaron mucho. River comenzó a sumar más gente en ataque con los ingresos de Facundo Affranchino y de Leandro Caruso, mientras que Tigre buscó rodaje con Mariano Pasini y la figura del volante Diego Castaño.
Sin embargo, cuando parecía que todo se terminaba y que el marcador no se iba a mover, apareció el ídolo de River, quien pasó a Mariano Echeverría (sin infracción, como algunos dicen) y mandó un centró al área para que Funes Mori hiciera delirar a todos los hinchas millonarios presentes.
River no hizo un buen trabajo, pero comenzó el torneo con el pie derecho. Más aún, sabiendo que dejó en el camino a un rival directo en la lucha por la permanencia en la primera división.
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